KAWASAKI KLE 500 "WALKING DEAD"

De nuevo escribo un artículo sobre una de las motos que se vinieron a nuestro tradicional viaje anual a Marruecos. Es un modelo que tiene fama de ser muy asfaltico y bastante poco campero, pero que con los cuatro retoques que le hizo su propietario mejoró mucho su faceta offroad.

Hoy hablamos de la Kawasaki KLE500 de Virgilio.

Los habituales de este blog sabéis que hace unos pocos meses disfrutamos de nuestro habitual viaje a Marruecos offroad, en el que realizamos más de 2.500km, la mayor parte de estos por pistas muy rotas, dunas, vadeos de ríos, etc.

Debo decir que la Kawa aguantó el tipo sin problemas, lo que demuestra que muchas veces los prejuicios sobre un determinado modelo de moto se esfuman una vez "metidos en faena".

Lo mismo me ocurrió con mi Honda Transalp 650, modelo al que mucha gente le atribuye una imagen muy asfáltica, pero que a mí me ha dado muchísimas satisfacciones fuera del asfalto.

También tengo que reconocer que tenía una opinión muy pobre de las Kawasaki en general. He tenido dos motos con el mismo motor que la KLE, una GPZ500 y una ER-5, y las dos me dieron bastantes averías mecánicas, pero viendo las palizas que le pega mi amigo Virgilio a su Kawa sin problemas, tal vez deba darles otra oportunidad.

El caso es que a Virgilio, alias XFree en algunos foros de motos, le surgió la oportunidad de comprar esta moto a un precio razonable, y tras utilizarla una temporada como vehículo habitual decidió mejorar sus aptitudes camperas para las salidas de nuestro grupo de amigos los fines de semana. También tenía en mente nuestro tradicional viaje a Marruecos en el que el año pasado vino con una Honda NX650 Dominator, un modelo en teoría más adecuado para un uso offroad.

Cuando compró esta KLE, ya venía con algunos retoques. La habían pintado en verde oscuro y añadido unas pegatinas de nuevo diseño. Las opiniones sobre el resultado estético son muy divergentes en nuestro grupo. También llevaba un escape Harpoon, más ligero y abierto que el original, aunque muy discreto si lleva el tapón.

Otra modificación en la moto era que llevaba el amortiguador trasero anclado en un punto más bajo del subchasis trasero, para elevar la parte trasera. Esta moto lleva varios agujeros en el chasis que permiten anclar el amortiguador en diferentes posiciones.

Deseoso de mejorarla un poco más sin gastarse mucho dinero, lo primero que hizo Virgilio fue añadirle un económico guardabarros alto Acerbis, que evita el problema de los guardabarros bajos que bloquean la rueda cuando se acumula barro. Para poder colocarlo, fue necesario fabricar una pequeña pletina, puesto que la tija inferior de la KLE no lleva las roscas para este tipo de guardabarros.

Para igualar la suspensión delantera con la altura de la trasera, y de paso endurecerla un poco para evitar topes y mejorar el comportamiento, se le han añadido unos casquillos de 20mm.

En nuestro grupo de amigos, uno tuvo una KLE500 y en una salida rompió el carter, que no viene suficientemente protegido de serie, así que para evitar sufrir el mismo problema Virgilio añadió dos laminas de aluminio de 1,5mm cada una en la zona más desprotegida. En Marruecos aguantó bien, pero al final del artículo veréis que no ha sido suficiente.

Otro punto mejorable en casi todas las motos sobre las que se va a pasar muchas horas de pie es el tamaño de las estriberas, que suele ser insuficiente y cansa o provoca dolor en la planta del pie.

Se nos echaban encima las fechas del viaje a Marruecos, y a Virgilio ya no le daba tiempo de intentar adaptar estriberas de otro modelo, así que recurrió a la opción fácil y las compró a medida para su moto, unas estriberas SW-Motech , que son más largas y anchas que las originales. La calidad de realización es muy buena. Además vienen con gomas antivibración para cuando se utilizan por asfalto, así como unos avisadores de inclinación que se pueden roscar en la parte inferior.

Por último, Virgilio le puso un soporte de GPS Touratech con cierre por llave para su Garmin, así como unas alzas de manillar, y la moto lleva neumáticos Mitas, un E09 trasero y un C17 en la parte delantera que han dado muy buen resultado.

La moto ha aguantado todo el viaje de manera magnífica, pudiendo mantener velocidades elevadas por autovía con todo confort, y a la vez pasando por todas las mismas zonas complicadas de piedra o arena por las que pasábamos los demás.

Los otros integrantes del grupo estábamos convencidos que la moto se quedaría enganchada en muchos puntos, pero lo cierto es que pasaba sin problemas. El tacto del bicilíndrico probablemente ayudaba a pasar con suavidad.

La moto solo sufrió dos problemas muy fáciles de solventar, la rotura del ajustador de distancia de la maneta de embrague, solucionado con un tornillo y una tuerca, y la rotura del cable de embrague, sustituido en menos de diez minutos. Por lo demás, zero problemas a pesar del trato muy duro al que fue sometida.

Sin embargo, su propietario si se quejaba de algunos topes de suspensión delantera en baches y zanjas profundas, a pesar de los casquillos, así que habría que buscar una mejora efectiva de la horquilla.

Otro problema que detectó fue que la protección del motor seguía siendo insuficiente incluso con las láminas de aluminio añadidas, que quedaron totalmente abolladas, y se puso a buscar algún cubrecarter más resistente, aunque no le ha dado tiempo ya que en una salida reciente ha roto el cárter tal como le ocurrió a nuestro compañero de salidas ya mencionado anteriormente. Afortunadamente, la parte inferior del cárter se compone de una bandeja fácilmente sustituible, pero queda comprobado que es el punto más débil de este modelo para un uso bastante cañero por campo.

Añado que a todos nos ha dejado pasmados las capacidades de esta moto, que ha logrado pasar por sitios muy complicados por los que incluso se suda con motos mucho más ligeras, a su ritmo pero sin quedarse atascada.

En artículos anteriores, ya os he hablado de algunas de la motos que participaron, la Yamaha XT660Z Ténéré de José Manuel, la Honda XL650V Transalp de Ángel, mi KTM640E y ahora la KLE de Virgilio, ya solo me falta la KTM EXC400 de José Enrique, cuyo artículo publicaré en breve.

Y tú, ¿de que manera mejorarías la KLE500? ¿La consideras una moto apta para uso offroad?

Si deseáis más ideas para mejorar este modelo, aquí hay un excelente post del foro Motostrail en el que un compañero aporta mucha información.

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