La elección está tomada, ya no hay vuelta atrás.
Tenía que tomar una decisión importante, y los compañeros de algunos foros me han ayudado a elegir.
Este es el proyecto.
Necesito una moto para uso diario.
Desde que vendí la Hornet me muevo con mi DR 650 campera para ir a trabajar, e incluso en algunas ocasiones he utilizado la KTM 640 cuando aún la tenía en versión supermotard.
Son motos divertidas, pero poco aptas para un uso como vehículo habitual. La DR lleva ruedas de tacos y arranque a pata, y la KTM es brusca, tiene poca autonomía y necesita bastante mantenimiento si le haces muchos kilómetros.
El caso es que hace unas semanas me surgió la oportunidad de hacerme con una DR 650 RSE del 92 por un precio razonable. La moto necesita bastante trabajo para poder utilizarla a diario, así que es la oportunidad perfecta para desmontarla y aprovechar para realizar una moto que cumpla con mis requisitos.
Pensé en tres posibilidades que me gustaban, modernizar la moto y conseguir la trail ideal que ninguna marca tiene actualmente en catálogo, hacer una scrambler cuya estética me gusta mucho, o realizar una moto para guerrilla urbana, aligerada al máximo.
Como las tres opciones me gustaban, propuse una votación en diferentes foros.
Pensaba que ganaría la opción de la scrambler, que están muy de moda ahora, pero lo cierto es que arrasó la idea de modernizar la moto. Esto demuestra que hay una necesidad real de motos tipo trail que permitan ir bien por carretera, y además poder divertirse un poco por campo. Todo lo contrario de lo que ofrecen las marcas actualmente, que tienen en venta motos demasiado asfálticas o camperas, pero ninguna en un punto medio.
Así que esta va a ser la opción retenida, modernizar la moto. Voy a intentar coger una moto de principios de los noventa, y tratar de conseguir que se integre bien entre motos veinte años más recientes.
Si lo consigo, tendrá muchas de las características que demandan los aficionados a este tipo de motos, ligera, con buenos recorridos de suspensión para campo, cómoda para un uso diario y en viajes, carenado protector, mantenimiento reducido, etc.
En su momento ya comenté que el proyecto tendría que cumplir tres condiciones, que la moto fuera utilizable a diario, y que el proyecto no requiriera mucha inversión en tiempo ni dinero. Así que a los aficionados a las restauraciones perfectas seguramente se les ponga los pelos de punta viendo como "atajo" ciertos procesos.
Bueno, toca empezar por el desmontaje:
Aquí tenéis la moto como llegó a casa, con mucho trabajo por delante, sobre todo de puesta a punto.
Empezamos quitando carenado, relojes y faro.
Seguimos quitando chapas. Se ve ligera, no?
Continuamos quitando escapes y araña.
Y ya que estamos, quitamos la caja de la batería y algunos componentes electricos.
Así que tras unas pocas horas de desmontaje, que es bastante divertido, toca una de las partes más pesadas:
Nos vemos para la siguiente parte.
Da cosa verla así, ánimos que el proyecto vale la pena.
ResponderEliminarPues fíjate que a mi me gusta así de sencilla. Un chasis, un motor y ruedas. Solo necesita un deposito para la gasolina y un asiento, no hace falta más.
EliminarPero la verdad es que así es bastante poco practica, jeje.
Gracias por tus ánimos, saludos.